Desde que Elon Musk ocupó el cargo de CEO de Twitter, las cosas para la compañía nunca estuvieron bien del todo. Una de las últimas polémicas (causadas por decisión del propio Musk) se debió al despido masivo de empleados, lo que generó el casi colapso de la red social.
Ahora, se conocen más controversias llamativas, y la última tiene que ver con la misoginia en la plataforma: esta aumentó un 69% desde que Elon Musk se convirtió en CEO de Twitter. Para quienes no lo sepan, el Instituto Nacional de las Mujeres del Gobierno de México define a la misoginia como las conductas, creencias o expresiones emocionales, psicológicas e ideológicas de odio hacia las mujeres y a lo femenino. Estas se manifiestan en conductas violentas y crueles hacia ellas por el solo hecho de ser mujeres.
Esta información llega de la mano del Instituto para el Diálogo Estratégico, una organización con sede en varios países que se dedica a investigar campañas de desinformación y odio en todo el mundo. A través de un estudio, ellos afirman que desde que Musk asumió el mando de la plataforma, se crearon miles de cuentas que difunden contenido de odio contra las mujeres; estas también comenzaron a seguir a personas que promueven tal material.
Para realizar la investigación, el Instituto utilizó como muestra los datos de 7 millones de seguidores de 132 perfiles misóginos. Para la creación de los nuevos seguidores, existieron cuatro momentos pico clave: cuando Elon Musk anunció que compraría Twitter y cuando concretó la compra (6 de abril y 28 de octubre), y los días en los que Twitter restableció la cuenta de Andrew Tate (influencer misógino de extrema derecha) y después fue arrestado (19 de noviembrey 30 de diciembre). Lo que llama la atención es que perfiles similares al de Tate (con contenido misógino) sumaron entre 22 y 29 mil seguidores al día durante esas jornadas; todas eran cuentas nuevas.
Con estos datos, la investigación sostiene que Elon Musk ha creado un “ambiente permisivo” para el crecimiento de este tipo de redes abusivas que promueven contenidos misógnos. A esto, el CEO leyó el estudio y se burló mediante un tuit: ‘Perdón por hacer que Twitter pase de ser un paraíso nutritivo a un lugar que tiene… trolls’, publicó el magnate en su perfil de Twitter.
Lamentblemente, los trabajadores de la plataforma la tienen difícil frente a la batalla contra los trolls y contenido de odio que se comparte en Twitter. Empleados y exempleados de la empresa comentaron a nuestos colegas de la BBC que varias funciones que buscan proteger troleos o acoso hacia los usuarios son difíciles de manejar por el poco personal que trabaja actualmente en la compañía. Debido al despido masivo de trabajadores que Musk ejecutó cuando asumió su actual cargo, ‘una persona totalmente nueva, sin experiencia, está haciendo lo que solían hacer más de 20 personas’, dijo uno de los ingenieros de la firma.
Bajo el discurso de la “defensa de la libertad de expesión”, Elon Musk relajó muchas medidas de protección contra el contenido de odio y restableció perfiles de cuentas populares que compartían el material mencionado. Los datos mencionados son preocupantes y se espera un cambio en la plataforma para evitar grandes consecuencias.